Los fraudes digitales han aumentado con el uso masivo de servicios en línea. Las recargas móviles, compras por internet y transferencias electrónicas pueden ser blanco de estafas si no se toman precauciones. Este artículo ofrece consejos prácticos para protegerse.
1. Tipos de fraudes más comunes
- Phishing: correos o mensajes falsos que simulan ser de empresas reales para robar datos.
- Páginas clonadas: sitios que imitan a los originales para engañar al usuario.
- Apps maliciosas: programas falsos que piden permisos innecesarios.
- Ofertas engañosas: promociones irreales que buscan obtener pagos adelantados.
2. Cómo evitar ser víctima
- Verifica siempre la URL del sitio antes de ingresar datos.
- Evita enlaces sospechosos en mensajes o redes sociales.
- Instala apps solo desde tiendas oficiales (Google Play, App Store).
- No compartas códigos de seguridad con nadie, ni por teléfono ni mensajes.
- Activa alertas bancarias para controlar movimientos en tus cuentas.
3. Herramientas para mayor seguridad
- Gestores de contraseñas: evitan repetir claves y las hacen más seguras.
- VPNs confiables: protegen tu conexión en redes públicas.
- Autenticación biométrica: más difícil de falsificar que un simple PIN.
4. Qué hacer si eres víctima de fraude
- Reporta de inmediato a tu banco o plataforma.
- Cambia todas tus contraseñas.
- Presenta una denuncia ante las autoridades de ciberseguridad.
- Guarda evidencia (capturas, mensajes, números de cuenta).